Hace mas de un par de horas que regrese de la casa de a lado y aun no puedo sacar de mi cabeza esa estúpida conversación que George y yo tuvimos.
–¿Penny?- Volteo hacia la puerta y me encuentro con el rostro cansado pero siempre alegre de Vera, la niñera de Tom-
–¿Si?-
–Son las ocho, debo irme y Tom aun no quiere dormirse.-
–No te preocupes, puedes irte, yo me encargo.- Contesto con una sonrisa deshaciéndome de mis pensamientos.
–Gracias.- La chica sale casi volando, mientras yo me dirijo a la habitación de mi hijo.
Al abrir la puerta y mirarlo, es imposible no recordar de nuevo a George. Cada día que transcurre, se parece más a él.
–¡Mami!- Corre hacia mi con un pequeño camión amarillo, regalo de Danny. Es alucinante lo mucho que ha crecido, ya casi cumple dos años y las únicas palabras que dice son mami, papi y hola.
–Vamos, ya es hora de dormir.- Le sonrió mientras lo levanto y lo llevo a su cuna. Después de una hora y algunos cuentos para dormir, logro mi objetivo. Miro la hora y al parecer, no es tan tarde, así que regreso a mi oficina para terminar el trabajo infernal que he tenido la ultima semana.
Beatles, Beatles, Beatles, es la única palabra que se mantiene en mi mente. ¡Este articulo me esta volviendo loca! Creo que comienzo a aborrecer a mis vecinos super estrellas.
Tomo un pequeño descanso, vuelvo a mirar el reloj y son las 11:35 PM, preparo un poco de té y salgo al patio trasero, con la taza en una mano y un cigarrillo en la otra.
El aire aquí afuera es extremadamente refrescante. Tomo mi silla favorita y coloco mi taza a un lado. Aún no puedo dejar de pensar en George y menos mirando sus fotos en el articulo.
Lo quiero, pero no puedo aguantar mas mierda en mi vida. Cada vez que estamos juntos pasan cosas estúpidas y no quiero eso para mi pequeño.
En este tipo de momentos es cuando extraño a Danny, él era el único que entendía totalmente a que me refería. Aunque por otra parte es mejor que ahora se encuentre lejos. Es duro admitirlo, pero el se merece a alguien mejor que yo.
–¡Por dios, esto es difícil!- Exclamo en voz alta. Un segundo después, un extraño ruido hace que me ponga de pie rápidamente.
–¿Quien esta ahí?- Se que es la pregunta mas estúpida, pero no se que mas hacer, los nervios me paralizan.
Al instante recuerdo que mi hijo esta indefensamente dormido en el piso de arriba. La puerta parece tan lejana. Comienzo a correr y siento como algo quema mi pierna. ¡Mierda! El maldito cigarrillo.
–¡Maldición! ¿Estas bien?- De un momento a otro, George aparece frente a mi.
–¿Que diablos pensabas al aparecerte así? ¿Acaso no podías simplemente llamar a la puerta?- Pregunto molesta, pero el ardor en mi pierna no me deja demostrarlo.
–Lo siento, no pensé que te asustaras tanto.- Luce tan lindo poniendo esa cara de preocupación. Por un instante me olvido del dolor y lo miro divertida.
–Vamos adentro, te traeré un poco de agua. ¿Puedes caminar?- Esa linda expresión aun sigue dibujada en su rostro.
–Tranquilo, tan solo es una quemadura leve, con un poco de pomada se me calmara.- Contesto con una sonrisa.
–En verdad lo siento.- Dice finalmente. Llevándome de vuelta a mi silla de jardín.
–Y bien... ¿Que rayos haces en mi patio?- Pregunto mientras él toma la silla siguiente a la mía.
–¿Segura que estas bien?- Pregunta de nuevo, tratando de evitar mi pregunta.
–George, te hice una pregunta.- Le digo mientras toco su mano suavemente.
–¿Por qué no quisiste salir conmigo?- Las palabras salen de su boca como si fueran balas.
Suspiro tranquilamente y lo observo, el mira al piso y después me mira fijamente a los ojos. Ese cosquilleo en el abdomen me mata.
–Ha pasado tanto...-
–Lo sé y aún seguimos aquí, no crees que ya es momento de volver a comenzar.- La esperanza en sus ojos es contagiosa. Por supuesto que lo creo y también lo quiero, pero no creo lograrlo.
–Esto es demasiado, no quiero mas problemas ahora, no quiero afectar a Tom.-
–No entiendo como a un niño de un año con ocho meses pueda afectarle que sus padres estén juntos.- Aún no se si es la emoción, pero cada vez lo siento más y más cerca de mi. De nuevo su respiración rosa mi rostro, este tipo de situaciones me vuelven loca.
–¿Sabes su edad exacta?- Pregunto, tratando de evadir su cercanía.
–Por supuesto que la sé, también es mi hijo ¿recuerdas?- Responde con una hermosa sonrisa.
–Claro, es imposible negarlo. Aunque agradezco que la prensa aún no sepa nada sobre él.-
–Vamos, no toda la vida podremos ocultarlo, al igual que...- El no termina de hablar cuando toma mi mano y poco a poco se acerca hasta rosar mis labios.
–Lo siento George, pero ya es tarde y creo que debes irte.- Digo esto mientras rápidamente me pongo de pie. Se que es algo estúpido pero me parece lo mejor por ahora.
El me mira sorprendido y a la vez confundido.
–Penny...- Toma mi mano de nuevo.
–Por favor... vete a casa.- Sin siquiera mirarlo, retiro mi mano y camino en dirección a la puerta. Nuevamente recuerdo la quemadura en mi pierna.
Sigo al interior y detrás de mi esta George. Subo las escaleras, mientras el se acerca mas a la puerta del frente.
–Piénsalo... en verdad, tan sólo piénsalo ¿quieres?.- Antes de que él salga, se escucha como Tom despierta llorando.
–¡Mami!- Grita desconsoladamente.
George me mira sonriendo y sin controlar mis emociones le regreso la sonrisa. Tomando en cuenta su propuesta.
–Te veo luego.- Subo apresurada por la escalera, un pequeño destello de esperanza se abre paso en mi interior. Tal vez tenga razón, tal vez después de todo funcione. Por otro lado, los recuerdos se hacen presentes. La ultima vez que me deje llevar por las emociones, termine con todo mi "universo" hecho trizas y destrozada. Desde ese momento me prometí hacer mas caso a la razón. Pero ahora ni siquiera puedo pensar claramente.
Entro al cuarto de mi pequeño, a quien encuentro hecho un mar de lágrimas y un poco asustado. Lo saco de su cuna y lo cargo. El apoya su pequeña cabeza en mi hombro, yo acaricio su espalda y poco a poco su llanto cesa.
–Todo esta bien.- Repito una y otra vez mientras Tom vuelve a dormir.
"Todo esta bien" Tuve que mencionar esa maldita frase ahora mismo, en el preciso momento en el que estoy menos cero por ciento segura de que todo estará bien.
¡Hola de nuevo! Como lo habrán notado, esta vez el capítulo fue narrado por Penny. A raíz de esto, les tengo una pregunta ¿Como les gusta mas que sean narrados los capítulos, por Penny o por el Narrador? En verdad quiero saber sus respuestas. También, les hablare sobre una recién creada pagina en Facebook sobre fanfics en la cual, se publicaran mis dos fics este (que al parecer sufrirá algunos cambios, no demasiados) y el de Johnny Be Good. Si alguna de ustedes esta interesada en leer o en publicar alguno de sus fics son bienvenidas. Les dejo el link (COMUNIDAD FANFICS "THE BEATLES") Y como siempre, gracias por seguir leyendo y por sus comentarios. ¡Cuidense!
oh, tu fic mejora cada vez mas!!! es una genialidad, espero pronto mas capitulos c:
ResponderEliminar¡George es simplemente hermoso! No pude evitar sonreír al leer su situación. COME ON PENNY, SÉ QUE QUIERES SIN ESFUERZO ALGUNO, George es apuesto e inteligente. AWWW, Tom es hermoso también, como su padre.
ResponderEliminar¡Me encantó el capítulo! Creo que me hago menos "bolas" leyendo la narración por Penny, así que supongo que así está perfecto... <3
AWN :( No tengo Facebook :( Pero tengo una fanfiction, por si tienes tiempo o quieres leer al hermoso de PAULIE, con mucho gusto te dejo el link: http://imagineinthe60s.blogspot.mx/
¡Sube pronto! Cuídate muchote.
<3 besos y abrazos <3
Me encanta como es George, ¡maldita sea, Penny, regresa con él, SE AMAN! Y además tienen un precioso hijo. Ay, amo todo esto pero creo que ya me desesperó que Penny no regrese con el >:( aunque me encanta la trama jaja.
ResponderEliminarMe gusta que Penny narré, ahí está mi opinión :D.
Sube pronto. Cuídate mucho. Besos. :3
No puedo amar más a George *-* DEBERÍAN VOLVER! SE AMAN! es que no lo entiendo D: Sigueeeee pleeease estoy desesperada
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